Pues sí, con esa forma particular que tiene de entender las relaciones laborales, nuestro equipo de gobierno nos sigue haciendo de las suyas. Ya son cuatro meses lo que adeuda a un buen número de compañeros de sus complementos de jornada partida.
No cabe duda que está tomando una posición de fuerza de cara a la próxima negociación del convenio colectivo. Es decir; vasallos míos, vuestra nómina y vuestros derechos dependen de la voluntad de quien firma. Porque todo se reduce a eso. Todo un trámite administrativo que se repite mes a mes por los departamentos involucrados y Recursos Humanos, acaba en la mesa del señor Concejal para su visto bueno.
¿Puede ser que no esté conforme? Pues no se sabe. Durante estos cuatro meses ni ha firmado, ni ha objetado nada; simplemente no ha querido firmar. Estampar esa firma, para ciertas personas, es algo más que un simple ejercicio de responsabilidad administrativa. Es un ejercicio de poder.
Para quien hace unos meses arengaba por las calles a los investigadores precarios, en justa reivindicación de salarios más justos, debe parecerle una broma del destino que el salario de otros empleados precarios dependa de un acto tan simple como estampar una firma. Alguien que se encuentra ante una paradoja vital de estas características no debería pasar por alto el refrán “Quien siembra vientos cosecha tempestades”.
Desde EPS hemos puesto a disposición de los compañeros afectados un escrito de reclamación de cantidades, requisito previo a su presentación ante la jurisdicción social. No somos partidarios de judicializar las relaciones laborales, pero este equipo de gobierno cierra cualquier otra puerta con su actitud.
Sección Sindical Ayuntamiento de Pinto. Espacio de Participación Sindical (EPS).
Pinto, a 30 de Julio de 2013.
Y donde coño esta el comité de empresa?
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