El Partido Popular de Pinto ha sufrido el más espantoso de los ridículos presentando una Moción en el Pleno municipal celebrado el 29 de noviembre, cuyo único fin era criminalizar a los que participaron en el piquete informativo formado en nuestra ciudad el pasado 14 de noviembre, y en especial a los concejales del MIA que participaron en el citado piquete. El PP se ha quedado absolutamente solo al defender su burdo montaje, PSOE y MIA han votado en contra y UPyD se ha abstenido. Sólo la mayoría absoluta de la que usan y abusan ha permitido que la Moción fuese aprobada.
En la citada Moción, extraordinario ejemplo de cinismo político, se afirma en diversos párrafos el respeto y la defensa del derecho de huelga. Estamos seguros de que cualquier observador bien informado percibe claramente que lo que pretenden realmente es acabar con ese derecho y establecer una auténtica dictadura del capital. Nos parece especialmente grave, que se pretenda engañar a la ciudadanía envolviéndose en la bandera de las libertades cuando se practican tanto la intolerancia como la persecución política con trabajadores municipales como con los de Aserpinto. Si pretenden autoproclamarse adalides de la defensa de los trabajadores demuéstrenlo en su propia casa.
Tanto el Concejal de Recursos Humanos o el de Educación, y la mismísima Alcaldesa, que vertieron una serie de calumnias, improperios y descalificaciones, todas ellas falsas, sobre los miembros del piquete informativo y sobre los concejales del MIA, quedaron retratados durante el desarrollo de la sesión plenaria. Una persona de tan “acrisolada formación política” como Miriam Rabaneda se permitió el desahogo de calificar de “fascistas” a los concejales del MIA, y el Concejal de Educación, tras escribir un artículo que “adornaba” con la foto de una cristalera rota que nada tenía que ver con la sede del PP ni con nada sucedido en Pinto, continuó con su goebbelsiana trayectoria de manipulaciones, mentiras y propaganda barata. En su línea ideológica habitual, han tratado de repetir mentiras para que parezcan verdades, afirmando cuestiones tan evidentemente falsas como que se habían lanzado petardos al interior de su sede.
También nos gustaría destacar, que el señor Concejal de Recursos Humanos afirmó tener detalles de lo que el calificó como “Parte policial”, cuestión ésta que nos genera, cuando menos, muchas dudas. No entendemos cómo el citado Concejal ha podido acceder al citado parte, cuando ni siquiera la Policía Local forma parte de sus competencias. Además esto supone una claro ejemplo de indefensión para los concejales del MIA. El simple hecho de que este Concejal usará políticamente dicho “parte policial” durante el Pleno, supone un hecho gravísimo, y demuestra bien a las claras el talante de los actuales dirigentes del PP pinteño.
El Portavoz del MIA se reafirmó en que lamentamos profundamente que la empleada municipal, cargo de confianza del PP, sufriese una crisis de ansiedad, y en que el papel jugado por los concejales del MIA fue el de apaciguar los ánimos y mediar en los pos ibles conflictos surgidos. De nada han servido estas afirmaciones ya que la voluntad del Partido Popular era únicamente criminalizar y defenestrar a todos los integrantes del piquete y, en especial, a los concejales del Movimiento de Izquierda Alternativa. Hay varios vídeos y numerosos testimonios que prueban que los Concejales del MIA trataron en todo momento de calmar los ánimos, y que fueron las personas que estaban en el interior de la sede del PP las que salieron a increpar a los miembros del piquete. Así mismo queda claro que, en las oficinas de los populares, no se produjeron ni agresiones ni rotura de cristales ni daños de ningún tipo.
Estamos ante un claro ejemplo de sectarismo ideológico, de rancio autoritarismo y de voluntad de devolver a nuestro país a los tiempos de la falta de libertad y de la represión. Se trata de denostar a los trabajadores, en especial a los que luchan por sus derechos, se trata de llevar a cabo una campaña, perfectamente orquestada, de calumnias y difamaciones, cuyo fin último es acabar con los derechos fundamentales de los trabajadores y, en particular, con el derecho de huelga. En este escenario, el PP puede tener muy claro que estaremos junto a los trabajadores, no nos dejaremos amedrentar por sus insidias, sus intentos de judicializar la política y sus falsedades.
Resulta evidente que el PP pinteño es el menos adecuado para hablar de ejemplos morales o éticos. Quien haya observado en los últimos años la política pinteña habrá reparado en una cohorte organizada de seguidores (por lo general de provecta edad) de este partido, que fomentaba la bronca y la tensión política por doquier. Alguno de los hechos protagonizados por simpatizantes del PP fueron tan significativos y “edificantes” como el intento de vuelco del vehículo del secretario general del PSM, Tomás Gómez. Todo esto era consentido, alguien podría pensar que hasta organizado y alentado, en un ejercicio de cobardía política sin parangón, por la dirección del PP pinteño. ¿Cómo pueden ahora calificar a un piquete informativo de “turba antidemocrática”?
El MIA no se va a dejar amedrentar y no va cejar en su esfuerzo por estar junto a los trabajadores, junto a los de la clase a la que pertenecen todos sus miembros, luchando por sus derechos, luchando por la democracia. Siempre estaremos orgullosos de la lucha de los trabajadores. Si no luchamos sucumbiremos ante la dictadura de los mercados y ante sus testaferros. Esos testaferros están en todas partes, y Pinto es un claro ejemplo de ello. ¿Qué podemos esperar de aquellos que votan contra la creación de un Banco de Alimentos, imponen nuevas condiciones laborales a los trabajadores municipales pese a su rechazo mayoritario, votan contra Mociones a favor de la Sanidad Pública o “regalan” dinero público a Asociaciones taurinas mientras lo escatiman a otras que desarrollan una probada labor social? Quien quiera combatir contra esas políticas siempre nos tendrá a su lado, nunca por encima, siempre de igual a igual, modestos pero orgullosos, con un profundo orgullo de clase.
Pinto, a 03 de Diciembre de 2012.
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